jueves, 2 de febrero de 2012

Presidente Chávez: El 4 de febrero fue un acontecimiento legitimado



El Jefe de Estado, reiteró la importancia del 4F en la historia de Venezuela: "Estoy seguro que lo que ocurra en el devenir de este siglo vendrá con el sello del 4 de febrero"

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, afirmó que la revolución que surgió el 4 de febrero de 1992 "fue un acontecimiento legitimado, incluso antes de ocurrir”. Tal afirmación la ofreció en una entrevista realizada por el periodista José Vicente Rangel en su programa "José Vicente Hoy", que fue grabado en el Palacio de Miraflores, sede de Gobierno.

“Yo soy de los que cree firmemente que el 4 de febrero fue un acontecimiento legitimado, incluso antes de ocurrir”, expresó tras explicar que esa revolución se legalizó con su triunfo en 1999.

"El dos de febrero (1999), día de la toma de posesión, después de la gran victoria del 6 de diciembre (1998) fue la legalización de la legitimidad revolucionaria", manifestó el primer Mandatario venezolano.

El Jefe de Estado, reiteró la importancia del 4F en la historia de Venezuela: “Estoy seguro que lo que ocurra en el devenir de este siglo vendrá con el sello del 4 de febrero".

A continuación teleSUR presenta la entrevista íntegra ofrecida por el presidente Hugo Chávez al periodista José Vicente Rangel:

-Vamos a arrancar ubicando esta conversación en el espacio de dos aniversarios: 4 de febrero y 2 de febrero. Golpe de Estado y tu ascenso a la Presidencia de la República después de las elecciones del 98. Qué significa eso? Qué significan esas dos fechas? Vamos a concatenarlas porque para mí tienen una conexión.

Claro, sin duda el 2 febrero de 1999 es consecuencia directa del 4 de febrero. Aún cuando soy de los que cree firmemente que el 4 de febrero fue un acontecimiento legitimado incluso antes de ocurrir.

Me explico, aquí venía una tormenta cuajándose desde los 70, los 80, comenzaban los 90. Salió el rayo, el rayo estaba legitimado, era un rayo legítimo, fue un hecho legítimo y además fue legitimado inmediatamente, ipsofacto por el mismo pueblo. El gran apoyo. Tú recuerdas como periodista, 80 por ciento de apoyo a la rebelión del 4 de febrero de un pueblo que estaba cansado, que no veía salida.

Ahora yo diría desde ese punto de vista, el 2 de febrero, el día de la toma de posesión después de la gran victoria del 6 de diciembre, fue como la legalización de la legitimidad Revolucionaria, porque estaba legitimada la Revolución del 4 de febrero, pero luego se legalizó con el triunfo electoral y el juramento aquel y nuestra llegada aquí.

- Podríamos hablar entonces de dos golpes de opinión. El golpe de opinión del 4 de febrero encarnado por un sector de la Fuerza Armada, que tú comandaste, y el golpe de opinión de las elecciones que culmina con la victoria electoral tuya, para la posesión del 2 de febrero. Estuvo presente en todo momento la opinión pública, tanto en el acto militar, como en el acto civil del voto, que es lo que determina tu ascenso al poder.
Como decía Simón Bolívar: La primera de todas las fuerzas es la opinión pública.

Desde ese punto de vista, fueron golpes de opinión. El 4 de febrero una revolución legítima apoyada inmediatamente por esa fuerza de la opinión pública y esa fuerza que se desató el 4 de febrero fue la que trajo para acá a Rafael Caldera, fue la que trajo aquí a este humilde soldado. Estoy seguro que lo que ocurra en el devenir de este siglo vendrá con el sello del 4 de febrero. Lo que siga aconteciendo aquí, a lo largo de los años que vienen.

El 4 de febrero es un hecho histórico de una gran profundidad, partió la historia en dos.

- Pero con la participación del pueblo y la fuerza militar. El binomio Fuerza Armada- pueblo es determinante en todo este proceso y en lo que viene también.

Sin duda alguna. ¿Cómo tú haces una Revolución sin el apoyo de la Fuerza Armada?
¿Sin el apoyo del pueblo? Hoy tenemos la revolución socialista apoyada por esas dos grandes columnas: Pueblo y la Fuerza Armada.

- ¿Y una contrarrevolución tampoco se puede hacer sin el apoyo de la Fuerza Armada?

Se demostró. De este mismo salón salieron corriendo a la puerta trasera de la historia. ¿Tú sabes quiénes, no? Los contrarrevolucionarios que pretendieron desconocer el ritmo de la historia.

¿Tú me preguntas: 4 de febrero y 2 de febrero? Son dos puntos de una línea que se ha convertido en un Proyecto Nacional de Desarrollo.

Yo estaba recordardando que el 4 de febrero traíamos ya lo que llamábamos el libro azul. Era un folleto muy modesto pero así estaba planteado, las líneas gruesas de lo que es ya, ahora sí, 20 años después, el Proyecto Nacional Simón Bolívar, había que pasar por la Asamblea Constituyente.

Nosotros el 4 de febrero no traíamos ningún plan de instalar en Venezuela una dictadura. Al contrario, era llamar a una Asamblea Constituyente. Vino el fracaso militar, vino el 'por ahora', siete años después, del 92 al 99, ese 2 de febrero yo firmé el decreto llamando a Referendo para la Asamblea Constituyente. Es decir, el 'por ahora' vino a continuar, el proceso del 4 de febrero continuó su rumbo, que quedó trunco el 2 de febrero. Es el rumbo del 4 de febrero que venimos siguiendo.

Hay un aspecto que vale la pena contrastar. 18 de octubre de 1945: Un golpe contra el Gobierno democrático del general Isaías Medina Angarita, de sectores de la Fuerza Armada con un partido, para entonces, popular Acción Democrática. Tres años después se derrumba aquel proyecto.

Yo creo que en la base de ese derrumbe estuvo la falta de cumplimiento del proyecto que se le ofreció al país de cambio, de transformación social. Eso devino en una dictadura militar que fue la de Marcos Pérez Jiménez.

A tí te acusan de dictador, pero resulta que has ejecutado un proyecto Revolucionario que es lo que distingue y que le ha dado estabilidad a este proceso.
Esa observación, contrastar el hecho Revolucionario del 18 de octubre con el 4 de febrero y el proyecto posterior. Creo que es interesante para la comprensión de la gente.

18 de octubre de 1945. Yo creo que eso fue un aborto, ahí no hubo ninguna Revolución de octubre, fue un aborto.

- Se le llamó Revolución y las consignas eran revolucionarias, aparentemente....
Recordemos que Venezuela venía saliendo de la larga noche gomecista, de la larga dictadura, férrea dictadura de Juan Vicente Gómez.

El proceso, sobretodo, no digamos tanto con el general López Contreras, pero con Medina Angarita. Medina Angarita comenzó una apertura democrática.
¿Quién lo puede negar? Ahí están las evidencias históricas y por eso digo: Fue abortado ese proceso hacia la democracia por un golpe de Estado antihistórico, un aborto pues.

Ahora, el 4 de febrero es totalmente contrario. Aquí Venezuela venía en una degenaración indetenible de la llamada democracia puntofijista hacia una dictadura incluso ya con colmillos.Poco se ha hablado de esto.
A mi me llaman tirano, dictador. No. Soy un anti dictador. Había grupos de generalotes y un grupo de la oligarquía venezolana que tenia casi listo el golpe de Estado, bueno por eso años 91,90,91. Sobretodo después del Caracazo.

Tú no recuerdas el gran papel protagónico que jugó, entre otros, el general Alliegro y la clase política se replegó y luego surgió la tesis, salida de los equipos de pensamiento de la burguesía. Incluso en Estados Unidos estaban ya aceptando la tesis que en Venezuela no habia más alternativa que un golpe de Estado.
Nosotros produjimos, entre otras cosas, el aborto de ese golpe de Estado.

Pero fue el parto Revolucionario del 4 de febrero muy distinto, totalmente contrario al aborto del 18 de octubre. Esto sí fue una Revolución, la del 4 de febrero y lo estamos demostrando en estos 20 años y lo seguiremos demostrando en los próximos 20 y los próximos 40 años y los próximos 80. Una verdadera Revolución. La última Revolución del siglo 20.

- La mejor demostración es la lealtad a esos principios. Es decir, si una vez que se inicia el Gobierno Revolucionario, a partir del 2 de febrero del 99 no se asumen los cambios, como se han asumido, y no se lleva adelante el proceso de cambio, el 4 de febrero hubiera quedado relegado en la historia. Porque es lo que le da legitimidad, la consecuencia del grupo que impulsó la transformación. La lealtad a unos primcipios.

A un programa, a unas ideas, a un programa. Un proyecto más que programa.
Tú sabes que Venezuela, a lo largo del siglo 19 y 20, la historia venezolana se acostumbró a presenciar la llegada, primero a la Casa Amarilla y luego a este Palacio, de hombres, partidos o movimientos que prometieron muchas cosas.

Pero luego aquí fueron incapacez de hacer el mas mínimo cambio y eso vino arrastrándose desde los tiempos de José Antonio Páez, José María Vargas, luego los Monagas, luego los compañeros de Zamora de la Guerra Federal. Casi todos llegaron a presidentes: Joaquín Crespo, Ignacio Andrade, Juan Crisostomo Falcón, Antonio Guzmán Blanco, no fueron capaces de impulsar ningún proceso Revolucionario, ningún cambio verdadero. No fueron consecuentes con las promesas, en algunos casos revolucionarias, como el caso de Guzmán Blanco o de Joaquín Crespo, y el siglo 20 ni se diga.

Terminando con Betancourt y todas esa promesas de Acción Democrática, de Copei. Todo eso fue un gran fiasco.

Nosotros no podíamos llegar aquí a convertirnos en un fraude más. Contra viento y contra marea teníamos que venir a cumplir con un proyecto y un compromiso. Eso fue lo que desató el golpe de Estado del 11 de abril.

-Entremos a la etapa que se inicia con el 2 de febrero de 1999. El Gobierno Revolucionario instaurado ya, funcionando. Cuáles fueron los aciertos iniciales y los desaciertos iniciales, en una perspectiva histórica que está en capacidad de considerar.

El primer gran acierto fue haber sido capaces, nosotros, de mantener una línea. Lo que decíamos hace rato. Ser consecuentes con un proyecto, una promesa, coherente y consecuente.

Yo recuerdo aquel paréntesis entre el 6 de diciembre y 2 de febrero en la viñeta. Ahí llegaba mucha gente. A mi se me acabó la libertad el mismo día que ganamos las elecciones.

Allá llegó mucha gente a hacer propuestas. Uno de los primeros en la mañana del día siguiente, fue el Embajador yankee con la visa y una carta de Mr. Clinton (Bill) invitándome a la Casa Blanca y después llegó gente, casi toda de la pequeña o de la gran burguesía, de los altos mandos militares.

Recuerdo algunas personas que llegaban a decir la Constituyente sí, pero el Congreso la puede convocar, para que usted se preserve. Hasta decretos redactados.

Recuerda tú que tenían mayoría Acción Democrática y Copei en aquel Congreso y casi todos los gobernadores eran de oposición y la Corte Suprema de Justicia, dominada por la burguesía, el poder electoral. El Estado estaba intacto, sólo estaba yo allí como una cabeza de playa, el Gobierno que se estaba instalando. Creo que fue un gran acierto mantener con una firmeza y a prueba de todo, el proyecto Constituyente y haber firmado el decreto contra viento y marea. Creo que fue el primer gran acierto.

- ¿Crees que hubo claridad inicial?
Yo creo que sí. Alguien pudiera decir que hubo una primera etapa donde no se aplicó a fondo la Revolución. Es cierto, pero si la hubiéramos tratado de aplicar a fondo, quizás hubiéramos abortado el proceso porque se trata de la viabilidad.
Recuerdo ahora mismo al profesor Sánz, a Calcaño, De Barbieri y la tesis de la viabilidad de los proyectos.
¿Era viable desde el punto de vista político inciar el Gobierno ya con un proyecto profundamente Revolucionario?
¿Había viabilidad política?
¿Cómo? Con casi todo el Estado en contra.
¿Habia viabilidad social, económica? No teníamos ni recursos para pagar sueldos.

-¿Podríamos hablar entonces de una concesión táctica a los poderes fácticos?

Yo creo que no. Más bien fue parte de una estrategia. La primera ofensiva que teníamos que lanzar era la Asamblea Contituyente. Recuerdo lo económico lo dejamos intacto. Pero había que abrir la brecha política al sistema, a través de la Asamblea Nacional Constituyente. No creo que fue ninguna concesión. Creo que estábamos estudiándonos. La burguesía criolla, el imperialismo, tratando de rodearme, anularme y anularnos y yo también, apenas con 40 años, un poquito más, 44, 45 años, pero ya un poco fogueado por el camino.

Ya yo te decía que cuando vine de Teniente ya yo andaba conspirando. No fui ningún improvisado. Estábamos como esos boxeadores en el primer round, haciéndonos el estudio.

-En que momento se rompe este estatus.
Se aprueba la Constitución y luego viene la relegitimación de la segunda victoria y luego las leyes habilitantes, que comienzan a poner los puntos sobre la ies.
La ley de Tierras, recuérdate que la quemaron por ahí en la calle; la ley del Petróleo. Aquí vino no sé cuántas veces el Embajador norteamericano con los altos representantes de la Exxon Mobile, la Conoco Phillips, la Chevron Texacco, los ingleses con la Shell. No sé cuántas más.

Recuerdo una conversacion de un viejo y examigo nuestro que me dijo: Hugo si no echas para atrás las Leyes Habilitantes viene un golpe.

Le dije, a punto de amanecer: Los espeararé. Pero no voy a echar para atrás esto.

Esto es parte de la vida, aquí está empeñada mi vida.
Ahí se rompió todo, ahí comenzó de verdad la batalla. Después de los escarceos iniciales de 99, 2000, 2001.

-¿Se puede decir que hubo un aprendizaje en la acción?
Siempre. Hay quienes lamentablemente, a pesar de las acciones, no aprenden. En la oposición venezolana hay varios de ellos, quienes a pesar de lo largo del camino y de las acciones no aprendieron o no aprenden.

-¿Tú si has aprendido?
En mi caso, modestamente lo digo, siempre he tratado de aprender, de asimilar conocimiemtos, asimilar experiencia, y con eso nutrir más aún esta voluntad de vivir y de luchar y vencer que a uno le impulsa.
Hay que aprender todos los días, uno tiene que tratar de sacar lecciones de los más duras realidades.

-¿Ese aprendizaje suyo no es una mezcla de aprendizaje con intuición?
A lo mejor tú que eres medio psicólogo. Yo creo que sí. Una vez el general Pérez Arcay, hace tiempo, él no sabia para nada que andaba yo en el movimiento revolucionario.

Yo le preguntaba muchas cosas, nos conseguíamos muy frecuentemente en la librería El Incendio, en el Círculo Militar o allá en la oficina del Ministerio de Defensa, donde editaban libros, en un viejo galpón. Ahí nos topábamos, buscando libros me decía: 'Chávez, Chávez yo lo veo buscando libros y preguntando cosas.
Usted fue invadido por la angustia del conocimiento'. Y es verdad. Hace muchas años que yo fui invadido por esa angustia, esas ganas de aprender, esas ganas de conocer, esa voluntad de conocer y luego cuando sentí que estaba atrapado por esa corriente que aquí me trajo, con más razón.

Cuando te contaba que Carlos Andrés Pérez me consiguió por ahí estudiando, como dando los primeros pasos, estudiando la ciencia política, es porque yo sentía necesidad de estudiar, de conocer más la ciencia política, la ciencia del Gobierno.

Muchos años estudiamos y yo lo que es el Gobierno, lo que es la nave del Estado, los poderes del Estado, el derecho comparado, la estrategia militar, la estrategia política, la geopolítica, todo eso me ayudó mucho a cumplir esta tarea que estamos cumpliendo.

- Pero... ¿qué más hay detrás de eso? ¿Detrás de Chávez? Yo se que tú eres un estudioso, creo que eres el Presidente que ha estudiado más en ejercicio del mando. Te tragas los libros. Ficción, cuentos, novelas, economía, política.

Pero eso no es suficiente. Yo conozco mucha gente que ha estudiado y no la pega. Qué hay detrás de esto? Aparte de la vocación y el deseo de gobernar, de dirgir a un país?
Me estás obligando a recurrir a Nietzsche, otra vez, a la filosofia.

Yo te mostraba allá en el Patio de Honor de Armas de la Escuela Militar aquel a diario mío de 1974 y el día aquel que llegó Carlos Andrés, otra vez, al Patio, el día que asumía la presidencia, al día siguiente al desfile militar.

Y yo que tenía 20 años, escribí ahí, yo no sé de dónde salió eso. No recuerdo: "Algún día veo al nuevo presidente, algún día me gustaria, quisiera tener la responsabilidad de llevar las riendas de la Patria de Bolívar". Una cosa así escribí. Nietzsche hablaba de las señales precursoras. Yo creo que a mi me ocurrió eso y desde entonces yo me vine preparando. Algo me impulsaba,una voluntad interna, secreta, escóndida, quizás genética. Bueno no sé de dónde. Pero también de cómo yo nací, donde crecí.

Yo recuerdo haber visto a Rómulo Betancourt con un liqui liqui blanco, que cruzó el puente Páez, el río Bocono, nos llevaron en un camión de estaca a los niños que éramos a mirar al Presidente que pasaba a entregar tierras de la reforma agraria.

Si mal no recuerdo, iba con John Kennedy, que vino aquí a entregar tierras. Era la alianza para el progreso.
Yo recuerdo a unos jóvenes norteamericanos que llegaron a Sabaneta por esos años, yo era monaguillo. Te estoy hablando hace 50 años. Nos enseñaban algunas palabras de inglés, repartian avena Quaker. Era la alianza para el progreso. Pero también recuerdo en los montes de San Hipólito, por el caño de Raya, que habia unos señores que los llamaban los guerrilleros. Ve donde uno nació y donde fue creciendo. Después vine para la Escuela Militar y a ti te vi como candidato presidencial cuando Pepé era aspirante a cadete en 1973. Hay mucha magia en todo esto, tú no crees?
Perez Arcay dice que una mano invisible fue colocando fichas en un tablero. Pero bueno sí hay cosas mas allá,a veces, incluso de lo racional, la intuición, por ejemplo, a veces es irracional. A veces tu hueles tanto.

-¿Cuál crees tú que es la percepción que tienen tus enemigos de ti?
Creo que algunos de ellos me han subestimando, me siguen subestimando, y se siguen autoengañando. Algunos dicen que yo me estoy muriendo, que el cáncer me llegó a los huesos, que me queda un año de vida cuando más. Otros dicen que estoy fuera de la realidad. Sigan creyendo

- Ya por lo menos matriculaste para este año.
Y matriculé bien, al galope.
Me dijo Putin: 'Oyé Chávez, cómo aguantas tú 10 horas de un mensaje a la nación? Le dije no fueron 10, fueron nueve horas y media.

- Esa pregunta de Putin se la hace todo el mundo aquí. ¿Cómo aguanta una persona 10 horas ahí?
No sé. Es como cuando tienes una gran responsabilidad, un desafio muy grande. Alguien dijo si un perro bravo me persigue soy capaz de saltar una cerca de 8 metros. No sé, son fuerzas que uno tiene por dentro acumuladas y en el momento requerido por una situación se manifiestan.

Yo no planifiqué durar 10 horas en la Asamblea, todo lo contrario. Trabajé desde diciembre con Elias (Jaua) y los equipos. Les dije vamos a hacer una exposición de dos horas con gráficos y los gráficos estaban todos ahí. Pero no. Yo llego ahí y empiezo. Veo el panorama, el pueblo en la calle, todo eso va entrando aquí, en mis códigos y después me expreso como lo que soy. Yo creo que en la Asamblea Nacional habló Chávez, el que retornó. No dos horas, sino lo que tenía que hablar.
A lo mejor ese Chávez de adentro está respondiendo con 10 horas, sin habérselo propuesto, a los que dicen que se está muriendo, para demostrarles la verdad. He podido pasar ahí cinco horas más.

- El problema que tiene tú Gobierno es que no ha contado con una oposición democrática...
Es un problema del país. Tu que eres político, ya de larga data, sabes lo importante que es tener fuerzas políticas leales con el país. Yo lo dije ahí y lo vuelvo a repetir. Si yo pierdo las elecciones el 7 de octubre, sería el primero en reconocerlo y entregaría el Gobierno y llamaría a mis seguidores civiles, militares, desde los más moderados a los más radicales, a obedecer el mandato del pueblo. Eso es lo que toca pues. Porque tampoco seria el fin del mundo para nosotros. Una Revolución no se juega en un día, se juega todos los días.

Pero fíjate de los pre candidatos de la oposición. Desde que lancé en la Asamblea Nacional ese desafio, ninguno responde, ninguno se compromete a reconocer.

Sigo diciéndolo aquí, por Televen, los candidatos de la oposición, díganlo, nada más esto: Qué reconocerán los resultados electorales del 7 de octubre, que será emitido al país y al mundo por quien tiene que emitirlo que es el Consejo Nacional Electoral. No es el departamento de Estado ni es el otro ni es la otra. El país necesita saber si hay lealtad en lo sectores políticos. Es una gran problema que tenemos nosotros.
Fíjate ahí en la Asamblea. A mi se me ocrrurió de repente, porque los vi con ganas de hablar a algunos. Eso tampoco estaba en el formato. Fue como un Aló Presidente. Veo a algunos con ganas de hablar, otros andaban muy sonreídos y entonces les di la palabra. Está bien. Ahí se les vieron las costuras.

Afortunadamente surgió a la luz, se evidenció una corriente de oposición que piensa políticamente, otra económicamente y otra que no piensa sino que odia. Eso es peligroso.

Ayer escribió Farruco Sesto una columna recomendándole a Venezuela no subestimar ese odio de algunos, ese odio es explosivo, es fascista y es uno de los factores muy peligrosos que tiene el país.
Hay que llamar a las corrientes de oposición a que sean leales con el juego democrático, leales con sus seguidores, leales con el país.

- Presidente... la oposición va a escoger un candidato el próximo 12 de febrero, a lo mejor no se dan las primarias, se habla de un consenso. Pero en todo caso, van a escoger un candidato por consenso o por primarias. ¿Qué significación tiene eso para ti?
Yo creo que en primer lugar, creo que ya lo escogieron. Sea cual sea el que gane las primarias o el llamado consenso. Todos son iguales. Desde mi punto de vista todos representan lo mismo. Son el candidato de la burguesía más rancia, más radical y el candidato del imperio yankiee, es que ya está escogido. Cómo lamenté que se retirará Eduardo Fernández, un político de larga trayectoria y un verdadero político.
De estos seis pre candidados ninguno calza los más mínimos requisitos para ser un candidato a la presidencia de la República de la Venezuela de hoy. Creo que ninguno. Así que ya lo escogieron. Creo que todos representan, como decía otra vez Nietzsche: Un fantasma recorre Europa. Por allá cerca de 1900 por allá, el nihilismo. Ellos son la nada. El nihilismo. Nosotros somos la Patria, el contraste, cualquiera de ellos nos va a permitir acentuar el contraste entre la antipatria y la Patria, entre la nada y el futuro de la Patria, de Venezuela, el desarrollo del país.

-Una vez que ellos seleccionen el candidato, practicamente de hecho comienza el proceso electoral. Una campaña electoral debe conjugar proyecto de país, programa, voluntad de trabajo y también política de alianzas. Me interesa preguntarte sobre la política de alianzas. ¿Cómo la concibes tú para estas elecciones?
La política de alianza nuestra es muy distinta a la de 1998. Recuerdas aquel llamado Polo Patriótico. Hoy la Revolución ha venido decantando los grupos, las corrientes, los partidos que verdaderamente apoyan el cambio Revolucionario.

Para nosotros hoy no es nada complicado el tema de las alianzas. Ahí está el llamado que se me ocurrio hacer al Gran Polo Patriótico. Más de 30 millones de organizaciones, desde las minúsculas hasta corrientes mucho más grandes de corte nacional se registraron y ese es un movimiento que esta ahí, que están en marcha, y por otra parte los partidos políticos.

Sí creo, en este momento te lo voy a decir, y es primera vez que lo voy a decir. He estado pensando eso en estos dias. Yo creo que las organizaciones sociales del Gran Polo Patriótico tienen una naturaleza muy diferente que los partidos politicos: el PSUV, el Partido Comunista de Venezuela, el Movimiento Electoral del Pueblo, el partido que creó la compañera Lina Ron, UPV, entonces yo quiero proponer que halla como dos mecanismos de alianza: Uno la alianza partidista, ¿no? Porque hay otra naturaleza, tú lo sabes, tú militaste en varios partidos políticos y los movimientos sociales que cabalgan sobre una gran diversidad y que van desde algunos moderados hasta radicales, revolucionarios, movimientos que a veces niegan incluso al Estado y hay que discutir con ellos la necesidad del Estado social, del Estado Revolucionario. Niegan la política. Son expresiones de la sociedad que hay que respetar, hay que llamarlos y hay que incorporarlos a los grandes debates.

-Las capas medias de la población, la clase media, siempre es un tema, una constante, que tú le has hecho una sierie de señales, que se han convertido en conquistas para ellos.

Yo creo hay que seguir dando señales y lanzar políticas. Yo creo que la Revolución ha sido en eso, con todo lo errores cometidos, sin embargo, hemos sido persistentes en lanzar, no sólo señales, llamados, programas, demostraciones de lealtad con la clase media, con los sectores medios.

La clase media venezolana debe apreciar una realidad que abre como dos posibilidades. La clase media, en el caso de Venezuela, cuando hace alianza o se une a la burguesía nacional y se subordina al imperio tiende a desaparecer.

Ya ocurrió así en los años 80, 90. La clase media venezolana estaba desapareciendo. Ahí estaban todos los indicadores. Ahora cuando se une al pueblo y, en este caso, a la Revolución se fortalece. En estos años la clase media venezolana lo que hecho es fortalecerse.
Estoy seguro que la clase media, que es una clase que piensa y que tiene generadores de opinión, grupos políticos y grupos sociales, una vez más este año lo va a demostrar. La gran mayoría va a votar por la Revolución. Va a seguir apostando por ella misma, por la Patria. No por la colonia. Ahí están las dos posiciones: O Patria o colonia y como decimos el grito en la calles, cómo es que dice Andrés Eloy Blanco: El grito del guerrillero se lo sabe la Sabana, los que quieran Patria vengan conmigo, vengan con nosotros, con la Revolución, es el camino a la Patria, es la construcción de la Patria.

La clase media tiene que ser una clase patriótica, no enemiga de la Patria.

- ¿Qué lectura tiene el mensaje ante la Asamblea Nacional? Primero rompiste el formato tradicional, al darle la palabra a representantes de la oposición, eso es insólito. Más allá de lo formal, del gesto.. ¿Qué perseguías tú? ¿Cuál era el trasfondo de eso? ¿Fue una cosa espontánea?

Si fue una cosa espontánea que no habia planificado.

-Pero te salió bien...

Yo creo que salió bien y para el país creo que es una buena señal. Más allá de quien salió como dicen 'ganacioso', si ellos o nosotros. Porque ellos dicen que se la comieron. Yo los leó. Se la comieron, allá ellos, pues.

-Después de eso, esta semana que termina, se reunió el vicepresidente Jaua con la mesa del sector agrícola de la oposción y también con el tema de la inseguridad, que fueron dos planteamientos que se hicieron ahí, a través de voceros de la oposición y tú lo recogiste. Es decir, que si se tradujo en algo concreto...

Claro, como estoy dispuesto a recoger cualquier crítica, cualquier aporte, cualquier idea que uno vea, que uno sienta y que uno perciba que es seria, que tiene argumentos, que está sustentada en argumentos. Es decir, que sea racional. Cuando Hiram Gaviria toma la palabra, yo le doy la palabra.

Fue Embajador en Francia, fuimos amigos.

Ojalá se imponga la razón. No ves que incluso vi a Andrés Velásquez que estaba por allá y le digo: Andrés no te molestes conmigo, tú te acuerdas cuando tal y tal y Pablo Medina que anda diciendo que Chávez hay que sacarlo por las buenas o por la malas. Bueno está bien. Pero Pablo fue un gran amigo. Cuando digo eso estoy abriendo el corazón, hablando desde el corazón, ni siquiera desde la razón. Desde el corazón, a quienes fueron viejos compañeros y que yo considero que deberían estar aquí.

Deberían estar aquí. No se les dio razón para terminar dando lástima, como algunos dan al lado de los adecos, de los copeyanos, de quienes asesinaron en algunos casos a viejos camaradas, viejos compañeros; yo les tiendo como el camino. Va a sonar un poco... no va a sonar muy bien... pero yo, desde mi corazón les tiendo el camino de la salvación.

Porque debe ser muy triste después de haber recorrido un camino revolucionario ... Dígame Pablo, cuántas peripecias vivimos juntos, para ver a Pablo ahí. A mi no deja de darme hasta tristeza, conociendo la trayectoria.

La primera vez que yo me reuní con Alfredo Maneiro estaba ahí Pablo Medina, que Pablo era como un ayudante de Maneiro, andaba con él, le cargaba una pistolita cuidando al hombre, andaban clandestinos, estaban fundando la Causa R.

No, no, no estaban clandestinos, ya existía la Causa R. Yo sí andaba clandestino, yo era el clandestino, no era él. Yo era teniente. Rosa Virginia, que acaba de venir por ahí con el gallito, que tiene más de 30 años, no caminaba todavía, la cargó Maneiro y Pablo. Comimos. Nancy mi esposa, la madre de mis hijos mayores, nos preparó un espagueti, comimos ahí en un apartamentico escóndido.

Y entonces ver a Pablo ahí dando lástima, entonces quizás yo desde el corazón tiendo la mano.

-Ese mensaje tuyo, eso que estás repitiendo, contrasta con la acusación o el señalamiento que tú adelantas una política de odio.

¿Cuál odio? El odio lo tienen otros. Es una vieja estrategia o estratagema de algunos sectores de acusarnos a nosotros desde el imperio.

No ves que nos acusan de ser los agresores cuando somos los agredidos, nos acusan de la dictadura cuando somos, más bien, enemigos de la dictadura y hemos evitado aquí la dictadura, hemos barrido una dictadura, la de (Pedro) Carmona.

Entonces ¿yo soy el dictador, el enemigo de la democracia y el primer Presidente que convocó a un referendo nacional aquí? El hijo de Sabaneta, el areñero de Sabaneta. Y a otro referendo.

Cómo fue que dijo (Luiz Inácio) Lula (da Silva), un día le preguntaron: ¿Cómo usted es amigo de ese tirano Chávez?. Y dijo Lula, ese gran compañero, por allá en Europa, adelante de muchos intelectuales: ¿Qué dictadura, Chávez? Si más bien en Venezuela hay exceso de democracia. Todos los años hay elecciones, y cuando no hay, Chávez las inventa.
Esa es la realidad. No hay ningún odio. Yo hablo con el corazón y si me lo permiten con el amor.

Como dijo el Che: El revolucionario está inspirado siempre por un acto de amor. El verdadero revolucionario, Cristo. Uno por amor es capaz de morir, por amor es que uno está aquí, por amor a la vida.

Ahora que he vuelto a las calles, a los campos, ando más lleno de amor. Ahora amo más a la vida y amo más a este pueblo y amo más este compromiso que he asumido con este colectivo.
Qué le ofreces de nuevo al país: ¿Consolidar los logros o profundizar la política de cambio?

Tengo muy claro lo que le ofrezco al país: la campaña no ha comenzado, pero esto es como un adelanto. En primer lugar, en estos años hemos venido logrando una serie de elementos. Tú decías consolidando, venimos consolidando un proceso que viene de menos a más.

Por ejemplo, en lo económico sólo una cifra, el crecimiento del PIB, es decir, la economía real en 333 por ciento; de 90 mil millones de dólares cuando llegamos a 300 mil millones de dolares el PIB. En lo social, la disminución de la pobreza, la pobreza extrema en 70 por ciento, y la pobreza general en más del 50 por ciento. Estas son casi 10 millones de personas que, o salieron de la pobreza extrema y la pobreza general o no cayeron porque hubieran caído en la pobreza si el ritmo del país hubiera seguido siendo el mismo.

Lo social, lo económico, la estabilidad política. Alguien me comento o escribió, creo que tu me comentaste ¿Cómo vas a cambiar al mismo tiempo al ministro de la Defensa, al ministro de Interior y Justicia, al vicepresidente y al canciller, qué gobierno hace eso al menos que tenga una crisis, aquí hay estabilidad, a qué presidente le da cáncer y está fuera del país y está por allá no sé cuánto tiempo y vuelve y vuelve?. El país sigue su ritmo.

¿Qué ofrezco yo? Continuar la estabilidad, fortalecer la estabilidad del país para continuar el proceso del desarrollo económico, del desarrollo social de Venezuela a través de la revolución democrática. ¿Qué ofrezco yo? Más revolución, más democracia, más socialismo. Afincarnos por el rumbo que llevamos. ¿Qué ofrece la oposición? La nada, la destrucción de los que hemos logrado y el caos, eso debería entenderlo el país hasta los más furibundos antichavistas deberían entenderlo, les interesa que yo siga aquí hasta a la derecha venezolana les interesa, a Televen, por ejemplo, le interesa que yo siga aquí, a los predicadores nacionales, a los empresarios grandes, medianos del sector privado les interesa que Chávez siga aquí.

Algunos no se quieren dar cuenta pero es así, es la realidad; tú ves los candidatos que ofrecen eso: la desestabilizacion del país, cualquiera de ellos que llegara aquí en menos de lo que canta un gallo el país temblaría, por eso no van a llegar. Venezuela va a seguir por el mismo rumbo de estabilidad. Primero, fíjate la ecuación: terminó la independencia, de la independencia la estabilidad, sobre la estabilidad el desarrollo y más allá la grandeza del país, los grandes objeticos del proyecto nacional en lo social, en lo económico, en lo político yo tengo muy claro cual es el rumbo que vamos a seguir.

- Pero algunos dicen que tú estás robando al país.
¿Quién dice?
- Lo dijeron
¡Ah! Bueno, está bien, un poco como dicen: ¡allá va el ladrón, agárrenlo! Pero es el ladrón el que está gritando ¿quién robó al país de verdad!? Yo lo que pasa es que no quise responder como desde dentro me mandaba el galopar de Maisanta.
- No personalicemos.
No, porque estábamos en la Asamblea allá, etc. No, no, no. Pero realmente ¿quién robó a quién? Yo pertenezco al club de los saqueados, millones y millones durante siglos; esa historia es vieja desde Bolívar, la burguesía venezolana saqueó al pueblo venezolano, lo robó, robó la Patria. Y lo que quedó lo entregó al imperio, al imperialismo.

Nosotros hemos llegado aquí a restituir en el marco, yo creo que la burguesía venezolana debería agradecerlo, pero ellos no agradecen nada, que hemos llegado a reordenar el país, a reordenar la propiedad de las cosas, a democratizar la propiedad, en paz, respetando sus derechos, respetando incluso las riquezas que acumularon como producto del gran saqueo histórico ¿ves? deberían agradecerlo, pero en verdad el pueblo fue el saqueado, la burguesía es la que robó, y robó y robó a este pueblo, y lo saqueó y le quitó casi todo.

¿Cuál es el riesgo de apostar el destino de una Revolución en una elección?
Ese riesgo creo que no existe; me han preguntado eso varias veces. Te refieres al 7 de octubre.
- Claro.
Claro, pero fíjate...
- Y te lo pregunto porque mucha gente se lo pregunta.
Sí, pero cómo te lo digo yo, las elecciones son algo inevitable.
- Es inherente al proceso.
Inherente al carácter democrático, participativo, de este proceso revolucionario. Nosotros siempre nos hemos negado, qué sé yo, a tomar otra vía pues, que elimine los procesos electorales, más bien los hemos propiciado, y ahí está la Constitución, el referendo, las elecciones locales, regionales, asambleas de vecinos, asambleas comunales, hasta la elección del Presidente.
Ahora, en el caso nuestro, José Vicente, cómo lo veo yo, no es que la Revolución Bolivariana se esté jugando su destino en un día, no, el día de las elecciones, no, no. Yo soy de los que cree que el destino de la Revolución Bolivariana se juega todos los días, desde que me levanto, ahora tengo la costumbre de levantarme temprano, acostarme más temprano, un poco cambiando de hábitos de vida, después de lo que he pasado, bueno, para cuidarme más. Ayer hablé con Cristina: ¿te estás cuidando, te estás cuidando?. Todo el mundo: ¡cuídate!

Entonces todos los días de este mundo se está jugando el destino de la Revolución Bolivariana. No es el día de las elecciones, claro, ese es un día muy importante; nosotros estamos obligados a la victoria, y además a una gran victoria, por eso yo voy a buscar ganar por lo menos. Si las elecciones pasadas ganamos con 63%, mira que yo voy a luchar duro para buscar el 70% , y esos 10 millones de votos, ese va a ser el techo, la gran meta, para que no quede ninguna duda.

- Pero aquí volvemos entonces a lo que se plantea, con motivo del silencio que guarda la oposición cuando tú la emplazas, a que diga que respetará el resultado. Porque se abre paso en este momento, no solamente con respecto a Venezuela, también en toda la región y en el mundo incluso, se abre paso una peligrosa doctrina, vamos a llamarla así, doctrina que es denunciar fraude cuando los factores de poder pierden una elección, y ganan las fuerzas democráticas y populares, eso tiene el aval de los Estados Unidos. Incluso el gobierno norteamericano tuvo la avilantez de decir que hubo fraude en las elecciones en Rusia; calificaron de fraudulentas las elecciones en Nicaragua, cuando ganó Ortega con el 62%; cuestionaron la elecciones de Cristina Kirchner; estuvieron a punto de cuestionar la elección de Humala en el Perú, también, salvo el apoyo a última hora de Vargas Llosa, etc., que impidió que los que estaban en contra de Humala profundizaran su campaña, pero el diario El Comercio de Lima fue brutal en el ataque a Humala. Y aquí pues hay ese silencio, que consiste realmente en disfrazar la derrota con la acusación de fraude; eso está planteado aquí, hay señales evidentes, hay sectores que lo plantean, sectores que cuestionan al árbitro, al Consejo Nacional Electoral. Sectores que dicen...

A la Fuerza Armada.

- A la Fuerza Armada. Y de eso vamos a hablar en seguida ¿Qué piensas tú de eso, cuál sería la respuesta tuya si aquí la reacción a una victoria tuya, y allí nada significa el volumen, desde luego que si es muy importante les cuesta más, pero si la diferencia es más o menos pequeña, eso abonaría el terreno para lanzar la aventura pues?.

No tengo duda de que tu razonamiento tiene un gran fundamento, yo mismo lo he dicho, aquí hay sectores jugando a la doctrina Obama, pues, porque Obama lo dijo, después del caso Libia, él dijo que ese es un método que sería aplicable en el futuro para el cambio de régimen en aquellos estados fallidos o qué sé yo, terroristas.
- Forajidos.
O forajidos, etc. Así que la amenaza está lanzada al mundo entero. Ahora, cómo estará el imperio yanqui de enloquecido que se atrevieron incluso a calificar de fraude las elecciones legislativas en Rusia, y ahora hay elecciones para Presidente en Rusia también, y en China también pronto, cada quien con sus métodos pues, con su soberanía.

Aquí hay sectores jugando a la doctrina Obama. Yo responsablemente ante el país, bueno, los iré señalando y además si tuviéramos pruebas en su momento los denunciaríamos pues. Porque el país serio, y ahí tengo que hacer un llamado incluso a sectores de la oposición que pudieran no comulgar con esta doctrina, a que lo piensen bien, y a que entre todos neutralicemos; a los medios de comunicación serios, sean de la oposición o no, etc., porque a nadie ¿a quién le va a convenir que vengan a bombardear a Caracas? por ejemplo; oye, Dios nos libre compadre, Dios nos libre, a bombardear Caracas, a bombardear Valencia, Maracaibo, a bombardear los campos petroleros, acabar con el país. Algunos sectores de oposición, repito, están jugando a eso, pero nosotros vamos a neutralizarlos, estoy seguro.
Si se les ocurriera desconocer nuestro triunfo. Mira, yo estaba recordando en la Asamblea y quiero recordarlo de nuevo, el papel que jugó alguien que fue muy amigo tuyo y mío también, menos mío que tuyo: Teodoro. Tú recuerdas la noche que le ganamos a Rosales, había tensión, había gente diciendo: No, que no reconozcan el triunfo, y salió Teodoro Petkoff y dijo ante el país, como jefe de campaña,creo que era, dijo: “reconocemos la victoria del gobierno del Presidente Chávez”, y eso bajó la tensión.

- Claro.
Bueno, yo estoy seguro que no faltará en la oposición gente que como Teodoro piense racionalmente, políticamente, el día 7 de octubre, cuando, y esto es lo más probable, y la más grandes de las probabilidades, bueno, nosotros terminamos el año con más de 60% de aprobación, y eso lo dicen encuestas incluso que no son gobierneras, algunas mediciones internacionales, y la oposición muy por allá, muy por debajo, y toda dividida, nosotros bien unidos, y nosotros con un proyecto, con un liderazgo; y esa brecha, que terminó siendo el 2011 como cerca de 20 puntos, yo estoy seguro que se va a ampliar, y nosotros vamos a ganar esas elecciones; y a la oposición no le queda otro recurso que reconocer el triunfo de la Revolución.
Ahora, aquellos que no lo hicieran, si se fueran por el camino de la conspiración, del desconocimiento al triunfo o al mandato popular, la búsqueda de corrientes golpistas y fascistas, yo creo que terminarían de suicidarse. La oposición política venezolana terminaría de suicidarse y prácticamente de desaparecer, y por otra parte ya yo no soy el Chávez del 2011, no, ya yo no soy el Chávez aquel del 13 de abril, 14 de abril.
En La Casona recibí a casi todos los que me mandaron a matar, y luego, bueno, tú dirigiste una mesa de diálogo durante meses. No, no, nosotros actuaríamos en consecuencia, y bueno, a tono con lo que pretendan hacer los enemigos de la Patria, los enemigos de la paz, no les permitiríamos desestabilizar a Venezuela, y además, Venezuela hoy forma parte de un conglomerado de países: la Unasur, la Celac, Venezuela hoy es reconocida por grandes potencias del mundo como China, como Rusia, países europeos, países africanos, países árabes. La Venezuela de hoy no es la Venezuela del siglo pasado, aislada, solitaria, debilitada, no, ni el pueblo de hoy es el pueblo dormido, dividido de hace 20, 30 años atrás, ni la Fuerza Armada Venezolana es la Fuerza Armada de hace 10 años atrás. Ha cambiado mucho el país, no van a poder desestabilizarnos.

- Pero lo intentan, lo intentan, y fíjate, yo quiero traer aquí un argumento que creo que es importante ¿no? Están asumiendo el tema militar, y yo creo que una oposición tiene derecho a manejar el tema militar en un Estado democrático, pero cuando el tema militar se asume a manera de intriga, sediciosamente, para sondear en el seno de la institución tendencias que puedan desestabilizar un país, y a un Estado de derecho como es el venezolano, entonces se prenden las alarmas indudablemente.
Con motivo de la designación del nuevo ministro de la Defensa, general Rangel Silva, se ha desatado una campaña feroz, personalizada en él. Un oficial que a mí me merece todo respeto, considero que es un hombre probo, honesto, un profesional eficiente y capaz y un hombre leal, leal al Presidente de la República que es el comandante en jefe, leal al Estado y a la Nación y al pueblo venezolano. Un diario que es vocero de la oposición tituló recientemente con lo siguiente: “Chávez quiere aparentar que la FAN le es leal como Rangel Silva...” ¿Qué piensas tú de eso?
- Bueno, ese diario creo que es el mismo que llamó a la batalla final en Miraflores, y es parte y es vocero de la oligarquía que se equivocó pero de cabo a rabo el 11 de abril; el 11 de abril pues, ellos pensaron que tenían el mandado hecho porque lograron reunir más de 100 generales y almirantes, es decir, un batallón de generales y almirantes, un batallón. Pero ese batallón de generales y almirantes no logró alzar ni un pelotón de soldados, entonces sigue equivocándose la burguesía venezolana si cree, y hoy se equivoca más que ayer, que va a conseguir en la Fuerza Armada Venezolana una corriente que lo apoye. Hoy más que nunca la Fuerza Armada está unida, el general en jefe Rangel es un hombre digno, como tú lo has dicho, un excelente comandante de tropa de toda su vida, y hay una Fuerza Armada hoy, desde los altos mandos hasta esos cadetes nuevos, estos soldados, los reclutas, los que entraron, que son los hijos del pueblo, muy claros acerca de cuál es su rol, cuál es su papel en esta historia pues.
Pero bueno, la oligarquía tendrá, ojalá que no se equivoquen, porque les va a pasar, si se equivocan, otra vez la aplanadora de la historia por encima. Sería un suicidio en verdad si ellos se lanzan por el camino de buscar un golpe de Estado, desestabilizar al país, que si las guarimbas, que si los paramilitares, que si el llamado a una invasión. Nada de eso va a ocurrir en Venezuela, nosotros vamos a ganar las elecciones, estoy seguro, por amplio margen, y cualquier intento de desestabilizarnos va a fracasar.

- Tú estás consciente de que hay una vinculación entre esa actitud que se está adelantando respecto a la Fuerza Armada, y que se centra en este momento en la designación del nuevo Ministro de la Defensa, y la política norteamericana. Fíjate que un vocero del Departamento de Estado declaró el jueves de esta semana que termina, declaró que había mucha preocupación en los Estados Unidos, en el gobierno americano por la designación de Rangel Silva como ministro de la Defensa.

Claro, es que la burguesía aquí, eso es una demostración más de que la burguesía criolla, la venezolana, no es sino vocera de la política, de la estrategia, de los intereses del imperialismo norteamericano, eso queda una vez más demostrado pues, sin duda alguna. Bueno, al general Rangel así como a mí, pero es que en Estados Unidos, tú recuerdas, a mí no me daban la visa, me tenían excluido. ¿Por qué? Por terrorista, por golpista y no sé cuántas cosas más; lo mismo Evo Morales, a (Rafael) Correa lo señalan también, y ahora que vino Ahmadineyad nos amenazan a los países que recibimos al Presidente de Irán, y la burguesía criolla lo que hace es aplaudir.

Bueno, no aplauden también la expulsión, bueno un atropello al derecho internacional, un atropello a la ética, de nuestra excónsul en Miami. Ahora como nosotros cerramos administrativamente el consulado por amenazas contra el personal, ahora me acusan a mí de que es un plan para sabotear las elecciones primarias, que es un atropello contra los venezolanos que viven en Miami. ¿Tú te das cuenta? Ahora resulta que somos nosotros los atropelladores, cuando somos los atropellados, pues, por el imperio.

Por eso es que esta burguesía, cada día, José Vicente, tiene menos argumentos, no tiene liderazgo, y más nunca va a poder llegar a gobernar este país, a este caserón, a este viejo caserón más nunca volverán, porque esas son demostraciones de que ellos significarían la perdición de todo lo que huela a Patria, a honestidad, a progreso, a futuro.

- Mira, yo te iba a preguntar por tu salud, pero ya veo que no necesito hacer esa pregunta. Te veo tan vital, con un trabajo quizá excesivo, verdaderamente repotenciado...
¿Tú crees que excesivo?
- Yo creo que sí, yo no soy médico, pero...
Me han dicho eso, tengo que estar revisando siempre los horarios, los ritmos, los ritmos.

- Pero en todo caso hay sectores que apuestan a que tú no puedas emplearte a fondo en una campaña tan exigente como la que viene.

Bueno, están apostando en falso, están apostando en falso. Si más bien estamos comenzando el año, y tú mismo lo has dicho, y yo creo que sí, en algunos casos arranqué muy rápido ¿no? El año arrancó como muy rápido, y entonces tengo que estar como halando las riendas, frenando un poco, porque tengo mucha vitalidad en verdad, y tengo muchas ganas, y a veces incluso se me olvida por lo que pasé, como que nunca hubiera ocurrido lo que ocurrió o los seis meses que pasé, las dos operaciones y todo aquello terrible, se me olvida muchas veces, tengo que recordarlo, o me lo tienen que estar recordando. Pero yo me siento bien, gracias a Dios, y cada día me siento mejor, gracias a Dios, gracias a la Virgen, a los santos, a los espíritus de la sabana, y espero que siga siendo así.

- Tú estuviste el 2 de enero, estuviste en Sabaneta, visitando a tu pueblo, tus amigos, recorriendo las calles, yo no sé, yo tuve la impresión de algo mágico allí ¿no? Algo macondiano ¿Qué sentiste tú en ese contacto de nuevo con tu gente, las vivencias de tu infancia, qué sintió Hugo Chávez, hoy Presidente de la República, líder nacional, internacional? Bueno, rememorando ese pasado el arañero, el monaguillo.
Tú sabes que yo en verdad-verdaíta, y esto me ocurre casi que a diario, yo no me siento ese Presidente investido de no sé qué cosa, no, no. Como dijo Fidel un día: Somos tipos que andamos por ahí, soy un tipo que anda por ahí, pues, un subversivo en Miraflores, dijiste tú una vez ¿no? Un luchador, etc.
Ahora, cuando llego a Sabaneta, desde la curva de Santa Rita, hay una curva ahí donde pasa el Caño Flor Amarillo, donde yo iba en bicicleta a buscar yuca y topocho cuando era niño. Ese pueblo de Santa Rita de Barinas, casi todos ahí son Chávez, ahí el caudillo era José Antonio Chávez, mi abuelo Andrés Chávez murió de 114 años, ¡114 años murió! Y tenía su conuco y su mujer, Andrés Chávez.

- Lo que le espera a los antichavistas.
Hermano de Rosa Inés Chávez, hija de la negra Inés, que dicen que era hija de un africano, el africano de Sabaneta. Fíjate, y luego la curva de Santa Rita, curva cerrada, y luego la recta que va directo a la entrada allá, muy cerca del Caño de Raya por este lado, más allá el Río Masparro, y de este lado la Madre Vieja del Boconó, y ahí están enclavadas mi amada Sabaneta, el Camoruco, la Calle Real, la Calle Bayón, y el torbellino, y vi por allá una vieja novia, y por allá los más viejos amigos que yo pueda recordar. ¡Laurencio Pérez! que tiene 70 años, tiene 24 hijos.
- Puro realismo mágico.
No, sí, sí, un torbellino que me absorbe; y qué Presidente voy a ser yo ahí, ahí soy Huguito, y llegar al sitio donde nacimos, y donde vamos a construir, estamos construyendo un preescolar muy pedido, cada vez que yo voy: ¡un preescolar, un preescolar! Y luego la Iglesia, la Plaza Bolívar, la policía donde estuve preso una noche de niño por violar el toque de queda, no sé qué era, el toque de queda, prohibían a los niños salir, y yo salí una noche a vender arañas y cosas, y ¡pum! me llevan detenido pues. Otra vez me llevan detenido porque andaba en bicicleta en la plaza, era prohibido andar en bicicleta en la plaza, y ¡pum! me llevan preso. Mi papá me tenía que ir a buscar. Yo era buena conducta, no creas que yo era un niño mala conducta, sólo que, bueno, vendía arañas de noche pues, a las ocho de la noche, o en bicicleta y me subía a la plaza Bolívar.
Llegar a la Iglesia donde fui monaguillo hace 50 años, y mirar la esquina donde yo sé que vivía la negra Inés, la hija del africano, donde nació mi padre, ahí había un semeruco, y ver a Pancho Bastidas, y ver al compadre Aldana y a mi tía Edilia, a mi tío Marcos Chávez, viejo romulero ahora chavista, por supuesto; y mi padre, mi madre, y mis tías, y no sé cuántos primos y parientes ¿ves? Puro realismo mágico. Cincuenta años, decía ¡Díos mío! hace 50 años aquí yo era el monaguillo, tocaba las campanas, la misma campana que está ahí, aunque la iglesia ya es moderna, no es aquella vieja iglesia de techo de palma, y paredes de tablas, era como de tabla, y piso de tierra ¿no?.
El monaguillo de hace 50 años; el Arañero, el que vendría arañas, el que tiraba cohetes ahí; y luego el cadete nuevo. Yo nunca dejé de ir a Sabaneta en vacaciones, José Vicente, y recuerdo cuando llegué de recluta hace 40 años a Sabaneta, en diciembre de 1971.

Fuente: Telesur/MINCI
Periodista: José Vicente Rangel