Sin duda alguna, el Comandante Presidente
Chávez, esta viviendo uno de los tiempos más difíciles de su transitada vida
personal, política y social, a propósito de su recaída al aparecer nuevamente
el fantasma de un cáncer maligno?.
No obstante, es valioso recalcar la actitud
indomable del líder de la Revolución Bolivariana Socialista de la Republica Bolivariana
de Venezuela. Es innegable su condición de cristiano y no demuestra, lo oculta
muy bien, estar abrumado por las circunstancias de su padecimiento.
Un rasgo de su Fe –con F mayúscula- que observamos, es no manifestar ningún tipo de
quejas, dudas o cuestionamientos al Dios de su devoción. Se mantiene confiado,
seguro de su victoria sobre la enfermedad.
Es por esto que se mantiene metido, embuido,
inserto en los problemas de su país, de su gente. Es un ser histórico. Su
sentido de justicia, no le permite ignorar la injusticia que le rodea. No
oculta, evade ni subestima los problemas que le preocupan. Esta Fe cristiana de
Hugo Chávez, parece comprometerlo con la realidad y lo responsabiliza con el prójimo
y consigo mismo. Considera estar seguro que en medio de esta crisis, Dios esta
con él.
En última instancia la Fe del Presidente venezolano,
lejos de paralizarlo lo mantiene en acción, es Fe vivencial. No se deja
controlar por las dificultades, no se deja dominar, más bien actúa, anda a
pesar de ellas.
En este camino difícil, doloroso e incierto,
tiene que vencer preocupaciones, miedos y enemigos y se abre paso. Es una Fe
que se vive, actúa. Demuestran ser los rasgos de un verdadero cristiano
evangélico en el sentido más amplio de la palabra.
Oramos por su total y
definitiva recuperación, confiando en nuestro Dios y apropiándonos de su Fe, que no lo angustia, no
lo desespera, le aumenta y le promueve la Esperanza.
Fuente: CBCR