Solidaridad sin fronteras de palabra y de hecho |
Hablamos del gran
programa médico y social creado por las hermanas Cuba y Venezuela, creyentes en
la mejorabilidad del ser humano por encima de la inversión pública en proyectos
belicistas agresivos movidos por ambiciones expansionistas. Son estas naciones
la acendrada antítesis del imperialismo.
Desde el inicio
del citado programa en el año 2004, se han efectuado más de 3 millones de
operaciones de la vista gratuitas, según la información suministrada por la
coordinadora Gabriela Soler.
“No sólo le
garantizamos la intervención quirúrgica, sino también la vigilancia en el pos
operatorio. Y toda la atención necesaria”, indicó Soler.
Un 8 de julio de
2004 partió un primer vuelo de venezolanos hacia Cuba para ser operados
gratuitamente de cataratas. La iniciativa se repitió durante más de un año
hasta que, el 25 de agosto de 2005, los presidentes de Cuba y Venezuela, Fidel
Castro y Hugo Chávez, respectivamente, firmaron el Compromiso Sandino, que
plantea operar a seis millones de personas, venezolanos y de otros países, en
10 años.
Las afecciones
más comunes atendidas por la “Misión Milagro” son pterigion, cataratas,
glaucoma y estrabismo, de acuerdo con los registros.
Además de las
intervenciones quirúrgicas, este programa también suministra lentes
correctivos. La dinámica más común de la misión para captar pacientes consiste
en efectuar jornadas programadas en todo el país. Las personas que asisten son
examinadas por oftalmólogos y optometristas, que se apoyan en equipos
especializados y determinan si el caso necesita lentes o si requiere cirugía.
Desde su creación
se han operado, gracias al desarrollo alcanzado en la medicina cubana, a
millares de latinoamericanos de países como El Salvador, Guatemala, Ecuador,
Colombia, Costa Rica, Venezuela, Bolivia, Argentina y República Dominicana, y
se pretende su aplicación en otros países. Como parte de su ampliación han
surgido Centros de Oftalmología en Venezuela y Bolivia con personal, equipos y
recursos cubanos.
En los centros
donde se alojan los pacientes en Cuba son atendidos por médicos, trabajadores
sociales o estudiantes universitarios que brindan parte de sus vacaciones para
dedicarlas a esta labor de solidaridad.
Artículo: Libre red
Fuente: El Revolucionario escarlata